Nuevo León se prepara para una ambiciosa transformación en materia de transporte con miras al Mundial de Futbol 2026. El gobernador Samuel García anunció este viernes una inversión de 58 mil millones de pesos para implementar el “Plan Maestro de Movilidad Actualizado”, diseñado en coordinación con el gabinete estatal y representantes del sector empresarial.
El objetivo es garantizar una movilidad más eficiente tanto para los habitantes como para los visitantes que llegarán durante la justa mundialista.
El proyecto se sustenta en cuatro ejes estratégicos: transporte digno, movilidad inteligente, corresponsabilidad vial y alternativas de movilidad. Entre las acciones destacadas se contempla duplicar la red del Metro, renovar el parque vehicular con camiones eléctricos fabricados en la entidad y establecer rutas optimizadas con sistemas de pago electrónico, ajustadas a la demanda real de cada municipio.
García subrayó que la apuesta está enfocada en el transporte público masivo, dejando de lado el modelo centrado en el automóvil particular. “En Nuevo León estamos apostando al futuro, a las buenas prácticas y al transporte público masivo, en lugar de apostarle a más carros”, afirmó, señalando que la meta es reducir el tráfico en las avenidas principales mediante soluciones que beneficien por igual a visitantes y residentes.
El plan prevé la incorporación de 4 mil camiones nuevos, de los cuales 2 mil 200 ya están en operación con internet gratuito, cámaras conectadas al C5 y al sistema Sintram para sincronizar semáforos. Las 1,200 unidades restantes se integrarán antes de que finalice 2025, con el propósito de mejorar la logística vial y reducir los tiempos de traslado.
Además, el programa contempla la construcción de puentes peatonales, carriles prioritarios y la modernización de infraestructura en puntos críticos de tráfico, como Guadalupe, Miguel Alemán y San Nicolás. Estas obras buscan posicionar a Monterrey como una ciudad líder en movilidad, no solo en la región, sino a nivel nacional.
La estrategia responde al incremento acelerado del parque vehicular en la zona metropolitana, que pasó de dos a tres millones de automóviles en apenas ocho años, frente a una población superior a los 6.4 millones de habitantes. Con este plan, el gobierno estatal pretende disminuir la congestión vial, optimizar el transporte público y mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.
