Rafael Orozco Vargas presentó su renuncia como Fiscal Central de Baja California el martes 5 de agosto, poniendo fin a casi cuatro años como uno de los principales mandos dentro de la Fiscalía General del Estado (FGE). Su decisión fue comunicada oficialmente al coordinador de Gabinete, Juan Carlos Buenrostro.
Según información oficial, Orozco Vargas argumentó motivos personales para dejar el cargo, señalando que desea dedicar más tiempo a su familia. A lo largo de su trayectoria dentro de la FGE, desempeñó distintos cargos, desde agente del Ministerio Público hasta coordinador del área de Homicidios Dolosos. También fue Fiscal Regional antes de asumir la Fiscalía Central.
Su nombramiento como Fiscal Central ocurrió a finales de 2021 e inicios de 2022, cuando Ricardo Iván Carpio asumió como Fiscal General del Estado. Durante ese periodo, Orozco Vargas asumió responsabilidades operativas clave, aunque su visibilidad dentro de la institución disminuyó con el paso del tiempo.
La llegada de María Elena Andrade Ramírez como titular de la FGE modificó el equilibrio interno. Fuentes señalan que Orozco fue mantenido en su puesto más por recomendación de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda que por decisión directa de la nueva fiscal.
Este martes por la mañana, Orozco Vargas oficializó su salida sin que, hasta este miércoles 6 de agosto, se haya dado a conocer quién lo sustituirá al frente de la Fiscalía Central. La FGE tampoco ha emitido un posicionamiento formal respecto al relevo.
Con esta salida, se reconfigura parte de la estructura interna de la Fiscalía estatal, en un contexto donde las decisiones políticas también han jugado un papel relevante en la permanencia de los altos mandos.
