Una jueza federal prohibió el viernes al gobierno estadounidense continuar deteniendo personas migrantes sin distinción en siete condados de California, incluidos Los Ángeles y Ventura, mientras avanza una demanda judicial.
La acción legal fue promovida por organizaciones defensoras de derechos migratorios que acusaron al gobierno de Donald Trump de aplicar redadas dirigidas a personas con rasgos latinos, especialmente en el sur del estado.
Entre quienes presentaron la demanda se encuentran tres trabajadores detenidos, así como dos ciudadanos estadounidenses, uno de los cuales fue arrestado aun después de mostrar su identificación oficial a los agentes migratorios.
Los grupos solicitaban frenar el uso de métodos que calificaron como contrarios a la Constitución, como arrestos sin órdenes judiciales, discriminación racial y la negación de representación legal en un centro de detención en Los Ángeles.
La jueza federal, Maame E. Frimpong, también ordenó al gobierno no impedir que defensores legales ingresen al centro B-18, en el centro de Los Ángeles, donde han sido retenidas personas migrantes sin contacto con abogados.
Frimpong emitió ambas órdenes como medidas provisionales tras escuchar los argumentos de los demandantes, quienes afirmaron que las prácticas del gobierno violaban las enmiendas Cuarta y Quinta de la Constitución estadounidense.
“Existe una gran cantidad de pruebas” que respaldan las denuncias, escribió Frimpong en su resolución, basándose en testimonios, videos y declaraciones presentadas en la audiencia judicial celebrada el día anterior.
Desde la Casa Blanca, la portavoz Abigail Jackson respondió que “ningún juez federal tiene la autoridad para definir la política migratoria”, indicando que la administración planea apelar la decisión.
Las detenciones se han realizado en espacios como autolavados, tiendas Home Depot y mercados de pulgas, donde testigos afirmaron que agentes federales aprehendieron personas por parecer latinas.
La orden judicial también abarca el condado de Ventura, donde agentes detuvieron a jornaleros en una granja de cannabis, hecho que desencadenó confrontaciones con manifestantes y dejó personas heridas.
