La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció un aumento salarial del 9% para los docentes, retroactivo al 1 de enero, así como un incremento adicional del 1% que entrará en vigor en septiembre.
Esta medida, según la mandataria, busca dignificar el trabajo del magisterio y reconocer su papel fundamental en el sistema educativo nacional.
En respuesta, Gerardo Espinoza Rodríguez, director de la Coalición para la Participación Social en la Educación (COPASE) en Baja California, celebró la iniciativa, pero consideró que este tipo de incrementos deben ir de la mano con esquemas de capacitación y actualización profesional. A su juicio, mejorar el salario es solo un paso para garantizar una educación de mayor calidad.
Espinoza recordó que dentro del Plan de Desarrollo Estatal se plantea la creación de un consejo evaluador independiente que supervise los procesos de profesionalización del magisterio, pero lamentó que hasta la fecha dicha instancia no haya sido puesta en marcha. Señaló que su implementación es clave para asegurar una mejora sostenida en el sector educativo.
El representante de COPASE subrayó que si bien todos los trabajadores desean mejores ingresos, el fortalecimiento de la estructura educativa es igualmente esencial. “Siempre estamos a favor de que los docentes tengan mejores condiciones laborales. Entiendo que todos quieren ganar más, pero un 12 o 15% nunca será suficiente si no se acompaña de una estructura”, enfatizó.
Finalmente, Espinoza reiteró la importancia de que los aumentos salariales sean parte de una estrategia integral que priorice la formación continua del magisterio, la evaluación justa y la mejora en los procesos de enseñanza, con el fin de lograr un impacto real en la calidad educativa del país.