Pese a que Baja California es uno de los estados con menor ocupación de empleos informales, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) publicada por INEGI muestra una tendencia al alza en las condiciones críticas laborales.
Durante el primer semestre de 2025, los datos laborales de Baja California mostraron ligeras variaciones respecto al año anterior. La población ocupada se ubicó en 1 millón 761 mil 894 personas, lo que representó el 60% del total estatal. Esta cifra fue inferior a la registrada en 2024, cuando se contabilizaron 1 millón 771 mil 133 personas con empleo.
La población desocupada alcanzó las 38 mil 975 personas, equivalente al 2.2% de la fuerza laboral, lo que representó una disminución en comparación con el 2.5% observado el año anterior. Sin embargo, el indicador combinado de ocupación parcial y desocupación fue de 5.6%, con 100 mil 848 personas afectadas.
En cuanto al trabajo asalariado, este agrupó al 74.2% de las personas ocupadas, lo que significó un ligero incremento frente al 73.6% de 2024. No obstante, las condiciones críticas de ocupación —como bajos ingresos o jornadas prolongadas— subieron al 31.4%, con un total de 553 mil 234 personas en esta situación.
La informalidad laboral disminuyó marginalmente a 37.2%, representando a 655 mil 424 trabajadores, frente al 37.4% registrado en 2024. Asimismo, la ocupación en el sector informal —actividad sin vínculo con unidades económicas registradas— pasó del 18.8% al 18.6%, con 327 mil 712 personas en esta categoría.
En Mexicali, la población económicamente activa aumentó en 6 mil 584 personas, mientras que la informalidad bajó un 4.6%, lo que significó una reducción de 21 mil 122 casos. La cantidad de trabajadores informales también disminuyó en 11% (8,008 personas).
Sin embargo, las condiciones laborales críticas aumentaron en un 2.7%, con 9,915 personas más enfrentando vulnerabilidades como ingresos insuficientes. La ocupación en el sector informal tuvo una baja del 0.2%, equivalente a 8 mil 008 casos.
En contraste, en Tijuana la población económicamente activa se redujo en 756 personas. Aunque la cantidad de trabajadores informales disminuyó en 0.1% (5 mil 254 personas), la tasa general de informalidad aumentó 0.9%, sumando 21 mil 122 personas a esta condición.
Las condiciones críticas de ocupación también se incrementaron en la ciudad fronteriza en 0.9%, con 5 mil 898 personas adicionales reportadas. La ocupación en el sector informal presentó una leve disminución de 0.2%, con una reducción de 2 mil 185 personas.
Estos datos reflejan que mientras hubo esfuerzos orientados a reducir la informalidad, las condiciones críticas en el empleo siguieron en aumento, lo que sugiere la necesidad de evaluar políticas laborales y de ingresos en la región.
