La exalcaldesa de Playas de Rosarito y actual diputada local de Morena, Hilda Araceli Brown Figueredo, respondió públicamente a las sanciones anunciadas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que la señalaron por presunta participación en actividades vinculadas al Cártel de Sinaloa.
En un mensaje dirigido a sus simpatizantes, Brown aseguró que las acusaciones en su contra forman parte de una campaña para desacreditarla.
“Amigas, amigos, a los que tienen confianza en mí, ustedes son testigos de cómo hemos luchado juntos por la transformación, contra la corrupción. Mi compromiso siempre ha sido con el movimiento; seguramente como consecuencia de esta lucha soy objeto de una infamia que pretende desacreditarme”, expresó.
La legisladora rechazó categóricamente que sus cuentas bancarias hayan sido congeladas, como se difundió en algunos medios. Para respaldar su versión, aseguró que incluso el pasado domingo viajó a San Diego, California, donde estuvo en un hospital acompañando a su tío que sufrió un derrame cerebral.
“Es absolutamente falso que mis cuentas hayan sido bloqueadas”, subrayó Brown, quien agregó que está dispuesta a enfrentar cualquier investigación. “Estoy firme para cualquier situación, ante cualquier autoridad”, sostuvo en su pronunciamiento.
El señalamiento contra Brown fue dado a conocer por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos, que la incluyó junto con otros empresarios y operadores financieros de Rosarito en una lista de sancionados por presunto tráfico de drogas y lavado de dinero a favor de la facción de Los Mayos del Cártel de Sinaloa.
Pese a la controversia, la diputada de Morena afirmó que continuará con su labor legislativa y cercana a sus representados. “Seguiré trabajando para ustedes como siempre”, concluyó, insistiendo en que las acusaciones carecen de sustento y forman parte de un intento de frenar su trayectoria política.