La educación inclusiva en Baja California avanza como una política pública centrada en la justicia social y el bienestar, más que como un simple programa educativo. Así lo destacó la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, durante su conferencia matutina, donde se presentaron los resultados alcanzados en beneficio de estudiantes indígenas, con discapacidad, hijos de jornaleros agrícolas y personas en situación de migración.
“Desde el inicio de nuestra administración hemos reforzado esta noble labor inclusiva en Baja California. Justamente hoy, la presidenta Claudia Sheinbaum hablaba sobre educación y la creación de más preparatorias, y es lo que queremos destacar con enfoque en la educación indígena e inclusiva”, expresó la mandataria.
De acuerdo con los datos presentados, más de 62 mil estudiantes en la entidad forman parte de esta modalidad: 16 mil pertenecen a comunidades indígenas, 24 mil tienen alguna discapacidad o aptitudes sobresalientes, 860 son hijas e hijos de jornaleros agrícolas, y 21 mil están en condición de migración.
La gobernadora señaló que su administración mantiene un enfoque prioritario en niñas, niños y adolescentes que enfrentan barreras para su desarrollo, y que los esfuerzos educativos se complementan con una inversión de 88 millones de pesos en infraestructura inclusiva. De ese monto, 38.1 millones se destinan a educación indígena, 46.4 millones a educación especial, y 3.4 millones a educación migrante, mediante programas como el PIMMEE (Programa de Insumos y Mantenimiento para el Mejoramiento Educativo) y La Escuela es Nuestra (PLEEN).
Por su parte, la titular de la Secretaría de Educación, Irma Martínez Manríquez, detalló que el programa de Educación Indígena atiende a 16 mil estudiantes en 134 escuelas, con el apoyo de 704 docentes que dominan lenguas originarias como mixteco, triqui, zapoteco, tlapaneco y huichol, entre otras.

En tanto, el programa de Educación Especial brinda atención a 24 mil estudiantes en 214 planteles, con la participación de mil 661 maestros especializados distribuidos en Centros de Atención Múltiple (CAM), Unidades de Servicio de Apoyo a la Educación Regular (USAER) y Centros de Atención Psicopedagógica de Educación Preescolar (CAPEP).
Respecto a la educación para hijas e hijos de jornaleros agrícolas, la funcionaria explicó que se garantiza la continuidad educativa desde preescolar hasta secundaria en campamentos de Ensenada, San Quintín y Mexicali, atendiendo a 860 estudiantes en 19 escuelas con el apoyo de 48 docentes.
Finalmente, Martínez Manríquez destacó que el programa de Educación para Migrantes Extranjeros atiende a más de 21 mil estudiantes, desde nivel inicial hasta superior, provenientes de Estados Unidos, Haití, Cuba, El Salvador, Colombia, Venezuela, Perú, China, Honduras y Guatemala, entre otros países.
