La fiscal general del estado, María Elena Andrade Ramírez, informó que el ataque contra las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) en Playas de Tijuana fue ejecutado con tres drones que lanzaron artefactos explosivos de fabricación casera.
Se trata del primer caso en que el crimen organizado utiliza esta tecnología con fines violentos en Baja California.
Detalló que los explosivos estaban elaborados con botellas plásticas rellenas de clavos, balines y fragmentos metálicos, los cuales fueron detonados a distancia.

El ataque se dirigió específicamente contra el área de la Unidad de Investigación de Secuestros, provocando daños en tres vehículos particulares y uno oficial, sin que se registraran personas heridas.
Señaló que el video que circula en redes sociales sobre el supuesto ataque no corresponde al hecho real.
Aclaró que la propia institución presentó imágenes auténticas grabadas por cámaras de seguridad durante la agresión, las cuales ya forman parte de la carpeta de investigación.
Explicó que los disparos reportados en la zona no fueron dirigidos contra las oficinas de la FGE, sino contra uno de los drones que sobrevolaban el área.
Aún no se ha determinado si dicho dron pertenecía a alguna corporación de seguridad o si era operado por particulares.

Agregó que el atentado podría estar relacionado con las recientes detenciones de integrantes y líderes de grupos delictivos en distintos municipios del estado, lo que podría representar una reacción del crimen organizado ante los avances de la fiscalía.
Aseguró que el ataque no quedará impune y que la institución trabaja de manera coordinada con autoridades federales y el Consulado de Estados Unidos, tras la alerta emitida por dicho organismo.

Destacó que la población puede mantenerse tranquila, ya que la agresión fue dirigida exclusivamente contra las instalaciones de la FGE y no representó riesgo para la ciudadanía.
