Burgueño rinde su primer Informe de Gobierno: “La evaluación que me importa es la de la gente”
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Este sábado la Unidad Deportiva de la colonia Mariano Matamoros fue el punto de encuentro para cientos de tijuanenses que acudieron a escuchar el primer Informe de Gobierno del alcalde Ismael Burgueño Ruiz. El ambiente fue festivo, entre aplausos y expectativas, con ciudadanos que reconocieron avances, pero también expresaron el deseo de que los próximos dos años sean igual de productivos o mejores.

Durante su mensaje, Burgueño agradeció el respaldo de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, de su familia y de las autoridades militares presentes. Recordó al expresidente Andrés Manuel López Obrador, a quien calificó como una inspiración para su forma de gobernar, y contrastó su estilo con administraciones anteriores, afirmando que su gestión “ha trabajado más y con mayor compromiso hacia la gente”.

El alcalde reconoció que aún hay pendientes por resolver, pero destacó los avances en temas de infraestructura, servicios públicos y orden urbano. Con un tono directo, sostuvo que el progreso de la ciudad depende del esfuerzo conjunto entre gobierno y ciudadanía. “Tijuana es responsabilidad de todos”, dijo al cerrar su discurso, una frase que ya se ha convertido en el sello de su administración.

Tras el acto, a pregunta expresa por esta redacción cuestionado sobre cómo evalúa el nivel de confianza ciudadana en su gobierno, respondió con claridad: “Cuando un gobierno habla mucho y materializa poco, no hay confianza ni credibilidad. Por eso me he enfocado en que todo lo que le he dicho a la gente se materialice.”

El alcalde mencionó que las acciones visibles —como la limpieza de calles, el ordenamiento de bulevares y la mejora de los servicios— son las que fortalecen el vínculo entre autoridades y población. “Si no limpiamos la casa, difícilmente se van a notar las otras acciones. La gente ya lo está viendo: hay orden, hay resultados y eso genera confianza”, expresó.

Finalmente el primer edil enfatizó que para él el mejor termómetro de su gestión no está en los informes técnicos, sino en la percepción ciudadana. “La mejor evaluación y la única que realmente me importa es la de la gente. Verlos aquí, acompañándonos, es la muestra de que vamos por el camino correcto”, concluyó.

Fotografía: Carlos Alegría