En sesión ordinaria, la diputada Daylín García presentó un exhorto aprobado de forma unánime, solicitando al Gobierno Federal concretar la firma del convenio binacional necesario para poner en operación el cruce fronterizo Mesa de Otay II.
La legisladora recordó que el proyecto fue concebido en 2008 dentro del Plan Maestro Fronterizo entre California y Baja California. Explicó que su objetivo es reducir la saturación en San Isidro y Otay I.
De acuerdo con García, la obra busca agilizar el tránsito de personas y mercancías, fortalecer el comercio internacional, atraer capital, generar empleos y consolidar el crecimiento económico en la zona fronteriza.
La construcción en territorio mexicano ya fue concluida por la Secretaría de la Defensa Nacional con inversión aproximada a seis mil millones de pesos. Se liberaron derechos de vía y se edificaron accesos e instalaciones.
La etapa pendiente corresponde a la instalación de equipamiento tecnológico indispensable para el funcionamiento. Según la legisladora, el factor decisivo es la firma del convenio entre SANDAG y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes.
Detalló que dicho instrumento ya cuenta con versiones validadas y aprobación de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Advirtió que la falta de firma retrasa beneficios económicos y proyecta dudas sobre continuidad de México.
Ante ello, el Congreso del Estado aprobó dirigir el exhorto a la Presidenta de México, al titular de la SICT, al Secretario de Relaciones Exteriores y al Director de Desarrollo Carretero.
“La puesta en operación de Otay II significa más oportunidades de empleo, mayor recaudación fiscal, expansión de cadenas de suministro y un impulso directo a la inversión. Baja California está lista”, afirmó García.
