Playas de Tijuana no son aptas para actividades recreativas: Cofepris
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La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) dio a conocer los resultados del monitoreo realizado entre el 23 de junio y el 4 de julio de 2025, con el propósito de informar a la población sobre las condiciones bacteriológicas del agua de mar en las principales playas del estado de Baja California.

En Playas de Rosarito, las autoridades reportaron que todos los puntos evaluados presentaron niveles de bacterias dentro del límite permitido, por lo que los sitios Rosarito I, Rosarito II, Hotel Rivera y Rosarito III fueron clasificados como aptos.

En la zona costera de Tijuana, los resultados variaron; tres zonas costeras no fueron recomendadas para su uso recreativo: Tijuana I (San Antonio del Mar), Baja Malibú y Playa Blanca. En estas ubicaciones, se detectaron niveles de bacterias superiores al estándar nacional.

Por otro lado, en la misma ciudad, las playas evaluadas como Tijuana II (Parque México), Tijuana III (La Mojonera/El Faro), Cañada Azteca y El Vigía fueron consideradas aptas para la recreación acuática por cumplir con los criterios sanitarios.

En Ensenada, los resultados de las muestras tomadas entre el 23 de junio y el 4 de julio indicaron condiciones favorables para los visitantes. Playas como La Joya, Monalisa, El Ciprés, Hermosa, La Misión y las dos ubicaciones frente a Conalep obtuvieron calificación apta.

En esta región, el agua de mar analizada cumplió con los límites establecidos por las autoridades sanitarias, lo que permite el uso recreativo sin representar un riesgo para la salud de los bañistas.

En San Felipe, el periodo de muestreo se realizó del 25 de junio al 3 de julio y todas las zonas evaluadas obtuvieron resultados dentro de los parámetros aceptables de calidad bacteriológica, entre los cuales se encuentran playa El Cortéz, Los Faisanes, Burócratas, Dorado Ranch, Malecón, Bonita (Campo Rubens), Lindo México y Marina Resort.

Cofepris informó que estas evaluaciones permiten ofrecer recomendaciones claras a la población sobre qué playas pueden ser utilizadas sin comprometer la salud de los visitantes, especialmente durante la temporada de mayor afluencia.

La dependencia reiteró que los análisis se basan en la presencia de bacterias coliformes, en particular enterococos, que sirven como indicadores de contaminación fecal, por lo que los resultados seguirán actualizándose conforme avance la temporada.