A través de comunicado oficial, la Sindicatura Municipal del de Tecate, minimizó y se deslindó del ataque armado en contra del agente Eduardo Reyes Herrera, quien se encuentra asignado como escolta de la sindica procuradora Sarahí Osuna Arce.
En su misiva, la Sindicatura precisa que, el agente Herrera, fue agredido cuando se encontraba fuera de servicio, además, se apoya en un reporte policiaco para mencionar que la agresión fue, “un posible hecho aislado”, descartando un ataque directo.
En el comunicado, la Sindicatura de Tecate hace mención que el agente de la FESC y adscrito a la Sindicatura transitaba sobre el bulevar Morelos en su automóvil particular, cuando una camioneta le dio alcance y posteriormente observa el vidrio quebrado.
El informe preliminar de esos acontecimientos es claro, a las 08:42 de la noche del martes 24 de junio, los agentes municipales respondieron a un reporte por detonaciones de arma de fuego en la gasolinera Chevron, de la colonia Andalucía.
Al arribo, los agentes localizaron un vehículo color gris de la marca Fiat con placas de circulación 9CML465 del Estado de California, su conductor se identificó como Miguel Ángel Montiel Carranza de 29 años y agente activo de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana. (FESC).

Los agentes observaron que el vehículo presentaba daños en su parte lateral del copiloto el cual aparentaban ser de un arma de fuego por lo que se solicita periciales para realizar el informe policial homologado.
Es la oficina de la Sindicatura Procuradora de Tecate la que proporciona detalles del ataque en el comunicado:
“El elemento se encontraba transitando sobre el bulevar Morelos en su automóvil particular, cuando una camioneta le dio alcance y posteriormente se percató que el vidrio del copiloto se encontraba roto, consecuencia de una detonación de arma de corto alcance, por lo que ingresó a una gasolinera, frente a Fraccionamiento Andalucía, para pedir apoyo”.
Si bien es cierto que el escolta se encontraba fuera de servicio y se transportaba en su vehículo particular, hacerlo del conocimiento público por la propia Sindicatura es señal de “curarse en salud”, pues no ofrecen apoyo, sino apartar el foco de atención de Sarahí Osuna Arce.
Aunque breve e intrascendente, al final del comunicado la Sindicatura condena el ataque, al mencionar que, “rechazan categóricamente cualquier acto de violencia, en especial aquellos que busquen amedrentar a quienes integran los equipos que trabajan diariamente por la legalidad, la paz y el bienestar de nuestra comunidad”.
